YOGA


EL yoga es una filosofía de vida. No se trata de coger una esterilla, hacer posturas y respirar. Es algo mucho más bonito que todo eso. Es la búsqueda de tu "yo interior", de tu paz mental. El equilibrio entre cuerpo y mente, a través de la respiración.

Conseguimos tener grandes beneficios:

- Mayor flexibilidad

- Mayor concentración

- Más atención tanto introspectivamente como al exterior

- Conocemos las limitaciones de nuestro cuerpo

- Aprendemos a agradecer

- Somos más sanos comiendo y bebemos más agua. No porque lo impongamos, sino que nuestro cuerpo y mente nos lo pide.

- Se solucionan algunos problemas de cervicales, espalda...etc.

- Minoramos el estrés y la ansiedad

- Conseguimos dormir mejor

- Estamos más relajados

- Eliminamos toxinas

- Tonificamos músculos... y así un largo etcétera.


LA HISTORIA DE ARCAIRIS


Como muchas de las personas que entran en el mundo del Reiki, del Yoga y de la meditación, entré de lleno en estas técnicas para controlar un estado de ansiedad muy elevado, con depresión, agorafobia y muchas situaciones desagradables que forman parte de mi pasado.

Hace 25 años, conocí el yoga, a través, de unas clases a las que asistía con unas amigas. Supe qué era, cómo se practicaba y noté sus beneficios, pero no lo implanté en mi vida. No era el momento, supongo.

Unos años más tarde, cuando toda mi vida se derrumbaba y no había ningún ápice de luz, me inicié en las técnicas de meditación y relajación, en el control de estrés, en la nutrición ortomolecular y, conocí personas, que me ayudaron a superar mi enfermedad, a través de técnicas como la hipnosis y la naturopatía. Volví a practicar yoga pero una lesión hizo que lo volviera a dejar, y la vida, me llevó a otro tipo de deportes en los que conseguía resultados físicos inmediatos y, que consideraba mi ego, eran más sencillos sus logros.

Hace diez años, conocí la terapia REIKI, que os explico en el apartado correspondiente de esta web. En ese momento, se movió todo más en mi interior. Realicé autosanaciones, volví a la meditación, relajación y a la práctica del yoga. Siempre me faltaba algo, la nutrición. También lo intenté, pero siempre caía en el autoconsumo de todo lo que no hacía bien a mi cuerpo.

Como veréis, la disciplina y la constancia no es una de mis virtudes, pero todo tiene un momento en la vida de las personas. 

Un instante en el que te dejas fluir y sale aquello que eres. Y aquí está lo que soy. Este proyecto en el que solo hay una base: que el equilibrio mental y físico sea nuestra vida, basándolo en la humildad, el amor y la constancia.

Siempre he tenido un pilar fundamental, mi hija. La que no solamente me ha apoyado sin saberlo, sino que me ha dado fuerzas cada instante de mi vida.

Gracias, gracias, gracias a ti.